Seite 15: Der Stein der Weisen (La pierre philosophique)



Man kann auch des Guten zuviel bekommen; diese Wahrheit mußte er bald erfahren. Das Gehör war bei ihm zu stark, er hörte ja das Gras wachsen, und deshalb hörte er auch jedes Menschenherz in Freude und Schmerz schlagen; zuletzt war ihm, als sei die ganze Welt eine große Uhrmacherwerkstatt, wo alle Uhren gingen "Tik tik", und alle Turmuhren schlugen "Kling, klang!" nein, das war nicht auszuhalten!
Aber er hielt die Ohren steif, so lange er konnte. Doch zuletzt wurde all der Lärm und das Geschrei zuviel für einen einzigen Menschen. Da gab es Straßenjungen bis zu sechzig Jahren, das Alter tut es ja nicht immer; sie schrien und lärmten, darüber konnte man noch lachen, aber dann kamen Klatsch und Tratsch, die durch alle Häuser, Gäßchen und Straßen bis auf die Landstraßen hinaus zischelten; die Lüge hatte die lauteste Stimme und spielte den Herrn, die Narrenschelle klingelte und sagte, daß sie die Kirchenglocke sei, da wurde es dem Hörer zu bunt, er steckte die Finger in beide Ohren, - aber noch immer hörte er falschen Gesang und bösen Klang.

Todos los excesos son malos. No tardó en comprobar la verdad de este proverbio. En efecto, su oído era tan sensible que podía percibir el crecimiento de la hierba, pero también el latir del corazón humano en sus alegrías y sus penas. Era como si el mundo entero fuese un taller de relojería, en que todos los relojes marchasen, dejando oír su tictac, mientras los de torre lanzaban su clingclang. Era insoportable.
Pero él aguzó el oído tanto como pudo, hasta que, al fin, el estruendo y griterío fueron demasiado intensos para un hombre solo. Vinieron golfillos de sesenta años -¡qué importa la edad!- gritando y alborotando. Al principio el joven se reía de ellos, pero luego se les sumaron chismes y comadrerías que, zumbando por las casas, callejones y calles, acababan saliendo a la carretera. La mentira era la que tenía la voz más recia y se las daba de gran señora; el cascabel del loco sonaba con la pretensión de ser la campana de la iglesia. Aquello fue ya demasiado para el oyente. Se taponó las orejas con los dedos... pero seguía oyendo cantos desafinados y sones horrísonos.

Vokabular
das ist des Guten zuviel = es miel sobre hojuelas
die Uhrmacherwerkstatt = el taller de relojería
die Turmuhr = el reloj de torre
Das ist nicht auszuhalten. = Es insoportable.
der Straßenjunge = el golfillo
Klatsch und Tratsch = chismes y comadrerías
die Narrenschelle = el cascabel del loco





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